lunes, 3 de mayo de 2010

Tipos de blefaritis

Tipos de blefaritis

Existen varios tipos de blefaritis:

Blefaritis alérgica
La blefaritis alérgica es provocada por diferentes sustancias que entran en contacto con el ojo, como pueden ser algunos cosméticos. Pero en realidad no son los cosméticos para los ojos los responsables del mayor número de dermatitis de contacto, sino cualquier sustancia que contamine los dedos y que por medio de las manos sea llevada a los ojos la que puede provocar dermatitis agudas o crónicas de los párpados. No debiendo olvidar nunca que los propios medicamentos utilizados para los ojos, colirios y pomadas pueden ser los causantes de una blefaritis alérgica de contacto.


Blefaritis escamosa o seborreica

Ya hemos hablado antes de los distintos hallazgos de una o de otra. Solo decir que cuando encontramos elementos de ambas hablamos de blefaritis mixta.


Blefaritis aguda

Cuando el párpado se infecta con bacterias en forma aguda se le denomina orzuelo. Si se inflama e infecta un folículo de una pestaña se denomina orzuelo externo y si la afectada es una glándula de meibomio se le llama orzuelo interno o chalazión agudo.
A la vista se observa una lesión abultada y enrojecida en el borde del párpado muy dolorosa en su fase aguda que puede llegar a ulcerarse si no es tratada a tiempo.


Blefaritis crónica

Es la más común y suele presentarse asociada a infección estafilocócica. Frecuentemente es asintomática, pero puede venir asociada con conjuntivitis o queratitis, posiblemente como una reacción de hipersensibilidad a antígenos estafilocócicos. La bacteria más comunmente encontrada en este tipo es el Estafilococo Aureus y el Estafilococo Epidermis, las cuales son bacterias que normalmente encontramos en la flora bacteriana palpebral, pero son más abundantes en los parpados con blefaritis.

El comportamiento de estas bacterias es impredecible. Pueden aparecer y desaparecer por un tiempo y volver a aparecer; esta puede ser la razón por la que la enfermedad es altamente recurrente. Los niveles de población pueden variar de acuerdo con una serie de factores, incluyendo componentes de los residuos de la película lagrimal, espacio disponible, nutrientes disponibles, medio ambiente/ ubicación geográfica, respuesta inmune, etc. Estudios hablan del “quorum sensing” el cual es la capacidad de las bacterias de reaccionar a su propia densidad de población, y se rige por la secreción bacteriana de moléculas denominadas auto-inductores.

A la vista se observan ambos párpados inflamados y enrojecidos con escamas y o costras y en casos avanzados se puede presentar ausencia de pestañas en algunas zonas.


Blefaritis anterior o posterior

Puede haber inflamación preferentemente en la raíz de las pestañas, y hablamos de blefaritis anterior, que puede ser tanto escamosa como seborreica. En este caso, puede afectarse la superficie del ojo si hay mucha colonización por bacterias, pero en caso contrario los síntomas se sitúan preferentemente en los párpados, con enrojecimiento, irritación o picor a ese nivel. Si sólo hay una alteración seborreica no suele dar muchos síntomas.


Aquí arriba vemos una blefaritis anterior, donde está principalmente afectada la zona de las pestañas, con enrojecimiento y costras. Aquí habría más componente escamoso (por infección de estafilococos, normalmente) que seborreico.

Si se afectan las glándulas de Meibomio sería una blefaritis posterior. En este caso no puede haber componente escamoso (la infección estafilocócica se sitúa en la raíz de las pestañas, y aquí no hay pestañas), por lo que se sobreentiende que es seborreica. Esta blefaritis recibe otros nombres, como meibomitis, disfunción de las glándulas de meibomio (DGM), espuma de meibomio, etc. Aunque en la imagen siguiente no parezca tan aparatoso como una blefaritis anterior escamosa es más fácil que se altere la superficie ocular, porque como decíamos antes, las glándulas de Meibomio se encargan de producir el componente lipídico de la lágrima. Si hay meibomitis este componente está alterado y la lágrima es “de mala calidad”, se rompe y no se mantiene homogéneamente repartida por la superficie del ojo. Así, cuando hablamos de la blefaritis como causa de ojo seco, casi siempre hablamos de blefaritis posterior (un problema de las glándulas de Meibomio).

En esta fotografía se ven muy bien los orificios de salida de las glándulas de Meibomio, porque están prácticamente todas con un “tapón de grasa”. Se observa bien la separación entre la parte anterior (la zona de las pestañas, que también está afectada porque tienen escamas) y la parte posterior con el exceso de secreción de las glándulas. Por supuesto, y como se ve en la fotografía, puede haber blefaritis anterior y posterior simultáneamente, de hecho es lo habitual.

Tania Campos Sanz

2 comentarios:

  1. Hola Tania,
    Leyendo este post me ha llamado la atención que el orzuelo es una blefaritis aguda. Creo que todos estamos familiarizados con éste término e incluso lo hemos sufrido, pero ¿puede desembocar en una blefaritis un poco más "desagradable", como alguna de las fotos?
    Muchas gracias

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  2. Hola!

    ¿Cuál es el tratamiento para la aguda? ¿Puede una persona ser propensa a tener cualquier tipo de blefaritis?

    Irene Ginés Gupo 8

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